Día 18: Koper, Poreč y Rovinj

Hoy tocaba visitar pueblos costeros de la región de Istria, hemos empezado desde el más lejano al norte par después ir bajando de regreso al sur.

El primer pueblo a visitar, Koper está situado en el poco trozo de costa que tiene Eslovenia, por lo que hemos tenido que cruzar la frontera, con la correspondiente caravana par acceder a él. Ha sido raro, hemos pasado de croata a esloveno y de kunas a euros de nuevo sólo para un rato. El pueblo de Koper está situado sobre una colina que da al mar, de callejuelas empinadas y un gran paseo marítimo, se ve un pueblo con mucho movimiento y crecimiento alrededor, normal siendo la única salida marítima de los eslovenos.

Tras ver Koper y cruzar de nuevo la frontera, nos hemos dirigido a Poreč, de camino y aprovechando que íbamos por carreteras locales, hemos parado a comer y por fin hemos podido probar la porqueta, un plato que desde que hemos llegado a Croacia tenemos gana de probar. Se trata de un cerdo entero asado como aqui haríamos un pollo a l'ast i que se sirve por raciones cortado a trozos, realmente muy bueno.

En Poreč hemos dado una vuelta por su casco antiguao, también muy bonito, eso si como nos ha cogido la peor hora del día para andar, eran las tres de la tarde y hacía un calor insoportable, quizás nos ha faltado poderlo disfrutar del todo.

De salida de Koper, nos hemos dirigido a Rovinj, un pueblo patrimonio de la humanidad y muy recomendado en todas las guías que hemos leido, y lo entiendo, un pueblo precioso, con unas calles empinadas que suben al castillo con unas vistas impresionantes, de lo más bonito que hemos visto en todo el viaje, 100% recomendable, eso si, las calles de adoquines desgastados resbalan muchísimo, por lo que si algún día vais, vigilad el calzado si no queréis ir sufriendo como me pasó a mi.

Por la noche, ya en Fazana, hemos repetido en la konoba Feral y creo que no será la última...

Calle comercial de Porec

Vista de Rovinj, la foto no le hace ni la más mínima justicia.

Calle de Rovinj, con el pavimento mas deslizanteque nos hemos encontrado. 

Calle de Rovinj, ideal para perderse.